Description

El hibisco, también conocido como rosa de China o flor de Jamaica, es un arbusto tropical de gran belleza, muy apreciado por sus grandes y vistosas flores de colores vivos que van del rojo y rosado al naranja y amarillo. Sus flores tienen forma de trompeta y son un imán para mariposas y colibríes, lo que añade vida al jardín. Es ideal para jardines tropicales o como planta en maceta para interiores bien iluminados.

Cuidados:
Luz: Necesita abundante luz solar directa para florecer en plenitud. En interiores, es importante ubicarlo en un lugar muy iluminado.
Riego: Moderado; el hibisco necesita tierra húmeda, pero no soporta el encharcamiento. Es sensible a la sequía, especialmente durante la floración.
Suelo: Prefiere suelos bien drenados y ricos en materia orgánica. Añadir compost mejora su crecimiento.
Temperatura: Crece mejor en climas cálidos y húmedos, con temperaturas de entre 15-30°C. No tolera heladas, por lo que en zonas frías debe protegerse en invierno o cultivarse en maceta para trasladarlo al interior.
Fertilización: Requiere fertilización regular durante la primavera y el verano con un fertilizante rico en potasio para favorecer la floración.
Poda: Podar en primavera ayuda a mantener su forma y a estimular el crecimiento de nuevas ramas y flores.

El hibisco es ideal para quienes buscan un arbusto exótico y lleno de color. Sus flores, además de ser decorativas, son usadas en infusiones y tienen propiedades medicinales.